Queridos míos, yo los exhorto, como a gente de paso y extranjeros: no cedan a esos deseos carnales que combaten contra el alma.Existen dos versiones del Antiguo Testamento, las cuales circulaban indistintamente en los tiempos de Jesús y los apóstoles:Estas promesas divinas nos alientan y nos guían a través de las pruebas y tribulaciones de la